Zoofi pronto se volvió popular entre los niños que querían dibujarla y llevársela, aunque Ro siempre cuidó de ella. Entre los amigos de Ro, empezaron a circular historias de las aventuras de Zoofi. Resultó que a Zoofi le gustaba bailar "La gasolina" y que sentía atracción por otros peluches. Zoofi está enamorada, o al menos lo parece: tiene un novio que se llama Josecito o Josefito, algo así. No lo conozco bien, porque no ha venido a presentarme sus respetos, como debe ser. Dicen que Zoofi y Josecito han sido cachados en escandalosas posiciones varias veces. Gracias a dios no me ha tocado presenciar ninguna.
Sí, es cierto, Zoofi nos ha hecho perder la cabeza más de una vez, pero algo tiene que todo mundo la quiere. Por eso no pude decir que no cuando llegó a decirnos su último capricho. Tratamos de convencerla de que una operación así podía traerle graves consecuencias, de que una vez hecha no hay vuelta atrás, pero todo fue inútil: Zoofi estaba convencida de hacerse un cambio radical... y así es como quedó nuestra pequeña:
Zoofi, no nos importa que seas una torturona o tiburtuga: siempre vas a ser nuestra hija, aunque seas una tortuga trans-especie, aunque nos muerdas con tus colmillos de tiburón, aunque nos eches aires por tus agallas o nos des aletazos cuando nades. Te queremos Zoofi... siempre te vamos a querer.
TAR, STA.
vaya pasaera mental q hay q tener en la cabeza pa escribir la historia de una tortuga de peluche, cn novio, q se hace una operación para ser un tiburón, y encima dicen q la kieren como a una hija, vaya gilipollez, y perdónenme eh..., pero es de locos.
ResponderBorrarJajajajjajajaja!
ResponderBorrarSí, desde fuera suena de locos, pero no me preocupa porque todos perdemos la cabeza cuando estamos enamorados y para mí es una locura de lo mejor.